Calcular el IRPF y el IVA de una factura

Autónomos

Cómo calcular el IVA o el IRPF de una factura para evitar sustos

Para los autónomos existen dos elementos clave a tener en cuenta a la hora de emitir una factura: la retención del IRPF y aplicar el IVA correctamente.

Entender qué es cada uno de estos impuestos, y cómo calcularlo y desglosarlo en las facturas emitidas por el autónomo, debe ser parte del día a día del negocio. Y puede evitarnos malentendidos con Hacienda con consecuencias desagradables.

¿Qué IVA o IRPF aplicar?

Lo primero que se debe tener claro a la hora de facturar es qué impuestos se tienen que aplicar al emitir una factura. Para aclarar esto, es recomendable acudir a la asesoría o llamar directamente a Hacienda y realizar la consulta.

Por un lado, el IRPF (Impuesto de la Renta de las Personas físicas), de forma general, se aplicará en la factura cuando se presten servicios profesionales a una empresa. Por otro lado, el IVA (Impuesto de valor añadido) habrá que incluirlo en todas las facturas, a excepción de aquellas actividades en concreto que estén exentas.

Pensando si es posible facturar sin ser autónomo

¿Es posible facturar sin ser autónomo?

En términos generales, y a modo de resumen, es habitual encontrarse:

En el caso del IVA:

  • General del 21%, aplicable a buena parte de bienes y servicios.
  • Reducido del 10%, para determinadas actividades específicas.
  • Superreducido del 4%, utilizado para productos considerados de primera necesidad.

En el caso del IRPF:

  • 19% para alquileres.
  • 15% para actividades profesionales.
  • 7% para nuevos autónomos de actividades profesionales.

IRPF e IVA

En ambos impuestos, lo adecuado es cumplir con todas las obligaciones de nuestro negocio, aplicándolos correctamente y presentando todos los modelos fiscales, evitando correr riesgos innecesarios con Hacienda. De no ser hacerlo, podemos ser sancionados. En cualquier caso, no se puede perder de vista que el contenido de las facturas lo determina el Reglamento por el que se regulan las obligaciones de facturación (Real Decreto 1619/2012, de 30 de noviembre). Concretamente, en el artículo 6, se especifica que estas deben incluir «el tipo impositivo o tipos impositivos, en su caso, aplicados a las operaciones» y «la cuota tributaria que, en su caso, se repercuta, que deberá consignarse por separado».

Cómo calculo el IVA de una factura

Para el cálculo del IVA se necesita tener, por un lado, el precio del servicio o producto. Esto es, en términos de Hacienda, la base imponible. Y, por otro, el tipo de IVA a aplicar. Vamos a hacer el cálculo, de forma práctica, con un ejemplo.

Suponemos que se presta un servicio cuyo precio, sin IVA, es de 100 euros. En primer lugar, se calcula el importe del IVA, donde la fórmula a aplicar sería:

‘Precio sin IVA o base imponible’ * ‘tipo de IVA’.

En el ejemplo: 100 euros * 21% = 21 euros.

A continuación, se suma, el importe del IVA recién calculado a la base imponible. En el ejemplo: 100 euros + 21 euros = 121 euros, que será el total de la factura con impuestos. Finalmente, el total de la factura debe ser de 121 euros, desglosando en esta los siguientes conceptos:

  • Base imponible: 100 euros
  • (+) IVA (21%): +21 euros
  • Total de la factura: 121 euros.

Retener el IRPF en factura

Cómo calculo el IRPF de una factura

Si se tiene una factura a la que solo se debe aplicar la retención del IRPF, debemos realizar el siguiente cálculo.

Pongamos que prestamos un servicio cuyo precio es de 100 euros. Se calcula el importe de la retención del IRPF, cuya fórmula a aplicar sería:

‘Base imponible’ * ‘tipo de IRPF’.

En el ejemplo: 100 euros * 15% = 15 euros.

Este importe de la retención es el que se restaría a la base imponible, quedando el desglose de la factura como sigue:

  • Base imponible: 100 euros
  • (-) IRPF (15%): -15 euros
  • Total de la factura: 85 euros

Bola extra: una factura con IVA e IRPF a la vez

También existen facturas a las que se aplica, a la vez, tanto el IVA como el IRPF, como puede ser la factura de alquiler de un local u oficina. Ya sabemos realizar el cálculo por separado de ambos impuestos, veamos para aplicarlos conjuntamente con un ejemplo.

Suponemos que la base imponible o ingreso bruto es de 100 euros. Se le resta la retención del IRPF. Esto es 15 euros. Se le suma el IVA, en este ejemplo, 21 euros. Solo queda reflejarlo todo en la factura con el siguiente desglose:

  • Base imponible: 100 euros
  • (-) IRPF (15%): -15 euros
  • (+) IVA (21%): +21 euros
  • Total de la factura: 106 euros

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