La industria de la moda es una de las más contaminantes e impactantes en el planeta. Es imperativo adoptar un cambio real, comenzando por los modelos de producción y consumo. Muchos procesos ya están en marcha, y el objetivo es lograr la llamada clothing circularity. Hablamos de ello con Mónica Rodríguez Corral, una de las fundadoras de Recovo, startup barcelonesa que pone en contacto a grandes y pequeñas empresas textiles para aprovechar el tejido que les ha sobrado.
Según la Comunidad Europea, la producción textil es responsable de aproximadamente el 20 % de la contaminación mundial del agua limpia. El lavado de materiales sintéticos libera aproximadamente 0,5 millones de toneladas de microfibras en el océano al año. Este proceso produce el 35 % de los microplásticos primarios que se liberan al medioambiente. La industria de la moda es responsable del 10 % de las emisiones globales de carbono, más que los vuelos internacionales y el transporte marítimo combinados.
La moda rápida (fast fashion), la provisión constante de nuevos estilos a precios muy bajos, causa un enorme aumento en la cantidad de ropa producida y desechada. En febrero de 2021, el Parlamento Europeo adoptó una resolución para exigir medidas adicionales a fin de lograr una economía totalmente circular, libre de tóxicos y neutral en carbono para 2050.
¿A quién se dirige Recovo?
Nuestro modelo es B2B, pero también ha tenido mucha aceptación entre los estudiantes de moda. Hemos cerrado varios convenios con diferentes universidades de España. Les damos una opción a los alumnos de acceder de forma online a tejidos sostenibles, ya que para ello sería complicado hacerlo.
¿Qué tipo de tejidos tratan?
Lo interesante y diferencial de Recovo es que, al ser un marketplace que conecta a todo tipo de marcas y tejidos, tenemos un catálogo enorme. Tratamos todo tipo de tejido, del algodón a la fibra natural, pero también caña o lana. Tenemos tejidos orgánicos y reciclados por un 30 % y luego también de otro tipo como el sintético. No tratamos prendas, solo tejidos.
¿Cuentan con una infraestructura totalmente digital?
Sí, nuestra estrategia, de hecho, no contempla llegar al consumidor final, solo marcas y diseñadores. En este sentido, Recovo no tiene stock ni plantas, somos solo intermediarios. Ponemos en contacto una marca a la que le haya sobrado un textil con quien lo quiera aprovechar. Es el vendedor quien envía el producto, nosotros somos una plataforma de intermediación. Nos encargamos de la gestión del producto, con descripción, trazabilidad y fotografías, a cambio de una comisión del 25 %.
Pienso que estamos haciendo mucho bien, incluso solo creando conexiones
”Mónica ”cofundadora
¿Cómo nació Recovo?
Descubrimos que a menudo el tejido en exceso se malvende o acaba en vertederos (casi un 85 %) y nosotros facilitamos que conserve su valor. La pandemia no ha influido mucho en nuestra idea, pero sí que ha generado más stock y puede que haya concienciado más a las marcas a la hora de pensar en sus colecciones. Ahora están más proactivas en buscar soluciones sostenibles frente a comprar cantidades enormes de tejidos que no saben si podrán usar o no. Trabajamos con varias multinacionales, como Pronovias o Ecoalf, que tienen interés en ser vendedoras. De hecho, los tejidos que tienen parados son costes muertos, que con nosotros pueden rentabilizar.
¿Tenían experiencia en la industria?
Yo trabajaba en ecommerce, tanto con mi propia web como en marketplace. Así que tenía muy claro que el negocio iba a ser digital. Antes de trabajar en Inditex tenía mi marca de ropa y confeccionaba las colecciones con tejido sobrante de otras marcas a través de un pequeño proveedor local en Barcelona. Ahora hacemos lo mismo pero a nivel global y digital. Las dos fundadoras hemos trabajado siempre en moda y éramos conscientes del exceso de stock de tejido que produce una colección. Así que quisimos lanzar un proyecto que solucionara un problema real pero que al mismo tiempo fuera fácil.
Quisimos lanzar un proyecto que solucionara un problema real pero que al mismo tiempo fuera fácil
”Mónica ”cofundadora
¿En qué punto están ahora?
Lanzamos la plataforma este julio pasado y la empresa existe desde mayo: acabamos de empezar. Al principio hemos utilizado capital propio para avanzar más rápido y ahora estamos en proceso de ronda de financiación. Estamos hablando con diferentes fondos nacionales y extranjeros. La plataforma cuenta con 400 usuarios registrados de forma orgánica y muchos contactos vienen de nuestra experiencia en el sector. El 50 % de las ventas las llevamos a cabo en España y el resto en el extranjero, siendo actualmente Italia el segundo mercado. Esperamos cerrar este año con unas ventas de 159 000 euros y aspiramos a facturar 1,3 millones en 2022, con un pedido medio de 625 euros. El objetivo para el año que viene es convertir en usuarios al 8 % de las marcas de moda españolas e internacionalizarnos. De momento, Queen of Raw es el único competidor con un modelo parecido al nuestro. Pero están en EE. UU. y en Europa no son muy conocidos.
¿Cómo se organizan internamente?
Ahora mismo en plantilla somos seis y todo el equipo (Marta Iglesias, Gonzalo Sáenz, Clara Méndez, José de Una, Romà Cardona) tiene participación en la empresa. Han estado desde el principio y ha habido mucho esfuerzo por parte de todos y todas. No hay una jerarquía definida, cada uno gobierna su ámbito. Creo que tomar las decisiones de forma colectiva es más efectivo. Además, no creo que haya diferencia entre hombres y mujeres. Nuestro equipo ha nacido de forma orgánica, no pensamos en distribuir roles según el género, nos salió mixto de forma natural. También porque venimos todos de la moda y tenemos más o menos la misma edad.
La pandemia ha generado más stock y puede que haya concienciado más a las marcas
”Mónica ”cofundadora
¿Considera que el concepto circularidad es algo generacional?
Totalmente. Yo tengo 29 años y todo el equipo está por debajo de los 30. El auge de la economía circular es sin duda algo generacional. Sobre todo nuestra generación y la que viene somos y vamos a ser consumidores superconscientes. Que las marcas hagan las cosas bien desde el punto de vista de la sostenibilidad va a ser prioritario, por encima del precio.
¿No cree que existe también mucho ‘postureo’ o greenwashing?
A nivel de marketing, nuestros informes nos dicen que el 77% de las empresas está desarrollando planes de comunicación donde destacan la sostenibilidad como su atributo principal. Es un concepto que está en boca de todos. Luego a nivel práctico hay una brecha entre lo que se comunica y el esfuerzo real para concretar esta comunicación. No obstante, también creo que las empresas se están poniendo las pilas de verdad y cada vez hay más acciones concretas y medibles. Pero como todos los procesos de cambio, no ocurre de la noche a la mañana.
Cuando emprendes sacas cosas que no sabías que tenías.
”Mónica ”cofundadora
¿A los jóvenes como usted, les aconsejaría emprender?
Por mi forma de ser, creo que es mejor arriesgarse y emprender. Además, cuando es tu proyecto lo das todo y al final descubres todo el potencial que tienes porque te obligas a ponerte a prueba. Esto es algo que si estás, por ejemplo, en una multinacional no te suele ocurrir, porque estás limitado por tu rol o departamento. Cuando emprendes sacas cosas que no sabías que tenías.
¿Se ve a largo plazo en Recovo?
Ahora nuestra idea es desarrollar el proyecto lo máximo posible porque el tema de la circularidad está creciendo mucho. Se está pasando a acciones reales más allá de las buenas intenciones. Así que Recovo creo que tiene mucho potencial. Por otro lado, en el futuro sí que nos planetaríamos hacer un exit, porque me gusta mucho emprender y trabajar con nuevas ideas. Estoy segura de que me gustaría empezar nuevos proyectos. Pero estamos hablando de futuro.
Imágenes I Recovo
Por Alberto Barbieri
