Camisas antimanchas, antiolores y ecológicas. Difícil no captar la atención.
Smartex es uno de los nombres que quiere marcar el cambio en nuestra forma de vestir.
Según un estudio de Infoholic Research, el mercado de la ropa inteligente vivirá un crecimiento anual del 116,8% hasta 2022, lo que generará un valor de más de 2.500 millones de dólares en el sector.
Hoy queremos conocer una de las marcas españolas que más está apostando por aunar ropa y tecnología. Hablamos con David Calle, CEO de Smartex, que nos va a contar cómo son esas prendas capaces de repeler líquidos y cuáles son los puntos fuertes de su negocio.
¿De qué forma surgió la idea de crear Smartex? ¿Cómo se fundó la empresa?
La idea de Smartex surgió de la mano de una cadena de tiendas llamadas Pantalón. Con la idea de crear una nueva web, buscábamos un hecho diferenciador y empezamos a investigar un producto innovador, que nos diera ese plus que nos hiciera diferentes de la competencia, y así dimos con el tejido antimanchas.
¿En qué se distingue Smartex de otras marcas de moda? ¿Cuál es vuestro valor diferencial?
Este tipo de marcas de moda tecnológica son más de perfil tech que de perfil moda. Esto se debe a que normalmente son creadas por gente de la rama de ciencias, como ingeniero y químicos. En nuestro caso, la marca ha sido creada por ingenieros, pero de la mano de personas que llevan en el negocio de la moda más de 20 años. Por tanto, se ven diferencias muy palpables con la competencia, sobre todo en el tema de diseños actuales y diferentes. Decidimos desarrollar una marca diferente pero sin irse a precios desorbitados.
Compramos ropa porque nos aburre la que ya tenemos, no porque se rompa o ya no sirva.
David Calle CEO de Smartex
En cuanto a nuestras prendas, son antimanchas porque, antes de ser confeccionadas, el hilo con el que están hechas es tratado con micropartículas de sílice, una sustancia hidrofóbica cuyas propiedades quedan integradas en el producto final. Además, el tejido tiene una forma especial de flor de loto con un ángulo de calado prácticamente nulo que hace que el líquido resbale por el exterior.
¿Cuál es vuestra filosofía de empresa?
Desde hace tiempo la moda funciona de forma cíclica, las tendencias vuelven una y otra vez, pero se avanza muy poco hacia delante. Es por eso que nuestra filosofía es continuar avanzando con mejores materiales y funcionalidades que hagan las prendas más cómodas y prácticas.
Además, el sector moda es uno de los más contaminantes del mundo, más que por sus procesos, por la infinidad de prendas que se consumen. En cuanto a nuestras prendas, primero no hay que lavarlas tantas veces como una prenda normal, ni siquiera hay que usar detergente, y segundo, y como consecuencia del punto anterior, la durabilidad de las prendas es mucho mayor que las de cualquier otra marca.
¿Qué tipo de usuario se interesa por vuestros productos?
Al ser camisas, camisetas y vaqueros abarcamos a casi toda la población. Nuestras prendas las puede llevar desde un chico de 19 años hasta un señor de 60. Además, hay diferentes diseños que pueden vestirse tanto en contextos más profesionales como en entornos más informales.
¿Qué diferencia hay entre vender una camisa tradicional a una camisa con la tecnología de Smartex?
La diferencia es que la camisa de Smartex te dura mucho más y te aporta la seguridad de estar perfecto en los momentos importantes, esa reunión de trabajo que te pone nervioso y te hace sudar más de la cuenta, ese comercial que tiene que patearse toda la ciudad y llegar a los clientes de punta en blanco… Son unas ventajas que no valoras hasta que no has probado una prenda Smartex.
Cuando habláis de vosotros mismos, hacéis hincapié en la armonía entre la belleza y lo práctico. ¿Cómo habéis conseguido llegar a un equilibrio?
Como comenté antes, es una armonía muy equilibrada entre moda y tecnología, esto se debe a que mi familia se ha dedicado toda la vida al mundo de la ropa, entonces lo he ‘mamado’ desde pequeño. Además estudié ingeniería industrial; por tanto, sólo podía salir algo así.
El sector moda es uno de los más contaminantes del mundo, más que por sus procesos, por la infinidad de prendas que se consumen.
David Calle CEO de Smartex
Es difícil encontrar un producto que sea práctico y a la vez bonito, pero nuestros investigades se coordinan con los equipos de diseño para lograr el producto redondo: camisas que nos gustan pero que nos permitan disfrutar de tu día a día.
Lleváis más de 30 años en el mundo de la moda. Si tuvieras que volver a empezar, ¿qué cambiarías o tratarías de mejorar?
Sobre todo, formación y feedback, es decir, que los empleados entren con una base muy sólida de lo que es la empresa y sepa qué errores ya hemos cometido y seguimos cometiendo, para que no tengan que reinventar la rueda cada vez. Es algo de lo que no te das cuenta hasta que es demasiado tarde. Se forma muy bien a los empleados y cada euro que inviertes en ellos se ve rentabilizado.
Tenéis tiendas físicas y tienda online. ¿Cuál es la importancia de cada una de ellas?
La mayoría de la facturación es en físico; el online es un mundo en el que hay que estar y poco a poco vamos cogiendo nombre, pero no hay nada como hacer la demostración de cómo funcionan las prendas en una tienda física. Tenemos 14 puntos de venta en toda España y eso es mucho conocimiento acumulado que nos permite ofrecer las mejores prestaciones.
¿Habéis pensado en incorporar prendas femeninas o productos para niños?
Es algo que no sólo nos hemos planteado, si no que la gente lo pide, sobre todo para niños, ellos son todo un reto para el problema de las manchas… Pero de momento es mejor centrarse en lo que ya tenemos y vamos desarrollando.
¿Cómo conectáis con vuestros usuarios?
Como he dicho antes, nuestro mejor escaparate son las tiendas y las personas que trabajan en ellas, que les gusta el producto y eso es algo que indirectamente se transmite al cliente.
También usamos las redes sociales. Además de perfiles en diferentes plataformas, tenemos un blog en el que queremos compartir con nuestros usuarios todas las novedades del lado más tecnológico de la moda.
Cada vez existen más empresas textiles que incorporan avances tecnológicos en sus materiales y procesos, ¿cuáles son vuestros referentes y por qué?
Nuestros referentes son las marcas de moda española que no son tan conocidas, pero que hacen un trabajo excelente aunque no tengan un nombre, pero en cuanto a tecnología tenemos otros referentes fuera del mundo de la moda.
Para el negocio, son claves las personas que trabajan en las tiendas. Les gusta el producto y eso es algo que indirectamente se transmite al cliente.
David Calle CEO de Smartex
Uno de los problemas que se asocia al mundo de la moda es el nivel de contaminación que esta industria genera. ¿De qué manera es importante la sostenibilidad para vosotros?
Somos conscientes de que el sector de la moda es de los mayores contaminantes hoy por hoy, pero creemos que lo que más hay que cambiar es la mentalidad de las personas, no explotar tanto el consumismo. Compramos ropa porque nos aburre la que ya tenemos, no porque se rompa o ya no sirva. Smartex propone prendas con mayor durabilidad y que no necesitan productos tóxicos para ser lavadas.
Cuidar el medioambiente es precisamente la razón de que usemos sílice en nuestras prendas, evita usar un recubrimiento de plástico, además de utilizar un proceso más amable y sostenible en el tiempo.
¿Cuál pensáis que es el límite para la fusión entre moda y tecnología? ¿Qué nos depara el futuro en este sector?
Creo que en concreto son dos campos que no tienen techo, cuando pensamos que en moda está todo inventado, siempre alguien se saca algo de la manga y nos sorprende. Y en tecnología, hace 50 años se trabajaba el campo con animales y mira ahora… Si tuviera que mencionar algún producto innovador que nos depara la moda del futuro, nombraría la ropa autopropulsada, como el traje de ‘Iron Man’.
Imágenes | Smartex
