La vuelta al cole preocupa entre los trabajadores de las pymes.
De ahí que muchas empresas tengan interés en contribuir a facilitar la conciliación de la vida laboral de sus empleados con la escolar de los hijos de estos. Las grandes tienen numerosos recursos para diseñar programas de prestaciones, pero ¿qué pueden hacer las pymes? Veamos algunas opciones.
Subvenciones y acuerdos para servicios prestados por terceros
Pocas pymes pueden aspirar a tener, pongamos por caso, una guardería para los hijos de las personas que trabajan en ella. Sin embargo, sí pueden satisfacer una ayuda para que puedan costear los servicios prestados por un tercero.
Incluso, en algunas situaciones, es factible el acuerdo de varias pymes para encontrar un único prestador que facilite unas condiciones ventajosas de servicio. Así, podemos imaginar el acuerdo de la asociación de comerciantes de una localidad con una guardería para que los empleados del sector puedan gozar de ventajas de horario y un servicio costeado por los comercios para los que trabajan.
Algo parecido sucede en el caso de los comedores escolares cuando no son plenamente gratuitos. Las empresas, por pequeñas que sean, pueden pagar un porcentaje del coste o, incluso, su importe completo.
Otro gasto importante para los padres y madres es el relacionado con libros y material escolar. Lo más útil suele ser pagar una cantidad a los empleados para que la dediquen a este tipo de gastos de sus hijos en edad escolar.
Otras posibilidades son cubrir un porcentaje de cualquier tipo de gasto que realicen, previa justificación mediante tickets y facturas o realizar la compra directa del material escolar para distribuirlo entre los empleados. En este último caso, es posible que las condiciones sean ventajosas si varias pymes se ponen de acuerdo para realizar un pedido conjunto.
Algo semejante sucede con el transporte escolar. Lo más sencillo es cubrir una parte del coste de los servicios de transporte público. Solamente en casos concretos puede ser interesante fletar algún medio, quizá con el concurso de varias pymes.
La vuelta al cole, un buen momento para patrocinios
Las actividades extraescolares de los niños necesitan un poco de impulso: tanto financiero como emocional. Los progenitores suelen agradecer mucho que su empresario patrocine el equipo deportivo o la escuela de música de sus hijos. Y si, además, la dirección de la empresa está un poco pendiente de cómo evoluciona, la satisfacción será doble.
Además, dado que suele haber muchas competiciones y eventos en los que coinciden distintos grupos escolares, es una gran oportunidad para dar visibilidad a nuestro negocio y que lo conozcan otras personas no vinculadas a la empresa.
Flexibilizar los horarios de entrada y salida
Llevar a los niños al colegio y recogerlos es una satisfacción, pero también un quebradero de cabeza si los horarios no cuadran. Los padres y madres agradecen enormemente que se les dé la opción de entrar un poco más tarde o salir un poco antes.
Lógicamente, ello reclama tener opciones para cumplir el horario pactado en otro momento. Es posible, por ejemplo, si se trabaja seis días en algunas semanas, si uno de los días de la semana se hacen algunas horas más o si se da la opción de teletrabajar de forma flexible en tiempos de descanso.
Fundamentalmente, lo principal es buscar una fórmula que garantice un equilibrio entre el servicio al cliente, la continuidad de los procesos, la motivación de la plantilla, la colaboración entre compañeros y la productividad laboral.
Promover la petición de permisos y excedencias
La vida escolar de los hijos puede pasar por momentos críticos que hagan incompatible su debida atención con las actividades laborales. La mayoría de los convenios recoge la posibilidad de pedir un permiso por unos días concretos o una excedencia.
Sin embargo, muchos empleados tienen la incertidumbre de cómo vivirán la vuelta al trabajo. Pueden tener miedo a encontrarse desubicados, a haber perdido opciones de ascenso profesional, a no haber participado en proyectos clave, a que quien se hizo cargo de sus labores no lo haya hecho adecuadamente…
Las empresas deben intentar, en la medida de lo posible, aportar certidumbre. Si el negocio tiene un tamaño medio, lo ideal puede ser establecer unos protocolos de reincorporación que disipen dudas. En micropymes, una reunión en la que se aclaren las salidas a los problemas que preocupan al trabajador puede ser suficiente.
De no optarse por facilitar permisos o excedencias, lo normal es que el trabajador se muestre mucho más estresado. Su cabeza estará en los problemas escolares de su hijo y su cuerpo en la empresa. Se habrá favorecido el presentismo y es posible que haya malas consecuencias para el clima laboral en la empresa.
La vida escolar de los hijos es uno de los grandes ejes de la conciliación al que no es recomendable dar la espalda. La vuelta al cole es un buen momento para tomar medidas.
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