La eficiencia energética apuesta por las energías renovables

Pymes

¿Preocupado por la eficiencia energética? Así puedes mejorarla en tu empresa

El 5 de marzo es el Día Mundial de la Eficiencia Energética, una de las principales preocupaciones de nuestra sociedad, tanto a nivel particular como en las empresas.

En 1998, se celebró en Austria la Primera Conferencia Internacional de Eficiencia Energética, que reunió a más de 350 expertos. Su propósito era reflexionar sobre las consecuencias del agotamiento de las energías fósiles en el planeta.

Fundeen, el crowdfunding para proyectos de energías renovables

El objetivo de la eficiencia energética es reducir la cantidad de energía necesaria para elaborar productos y servicios. Está relacionada con el cambio climático, el desarrollo de energías renovables y una mayor sostenibilidad medioambiental.

Ventajas para las empresas

  • Reducción de los gastos energéticos. Incluidos los de mantenimiento y operación.
  • Mejora de la competitividad. Las empresas dejan de preocuparse por la subida del precio de la energía.
  • Aumenta la productividad de los trabajadores. Un estudio de la Harvard School of Public Health explica que los trabajadores de edificios sostenibles mejoran su función cognitiva en un 26% y la calidad del sueño en un 6%. Por tanto, son más felices y se encuentran más sanos.
  • Retener el talento. Los trabajadores prefieren las empresas que se preocupan por el medioambiente y la sostenibilidad.
  • Responsabilidad Social Corporativa. Las compañías que se preocupan por la lucha contra el cambio climático y los gases invernadero tienen mejor imagen de cara a los consumidores.
  • Contribuye a la economía nacional. Reduce el nivel de las importaciones de energía, así como el gasto en el uso de los recursos del país.

Cómo mejorar la eficiencia energética en la empresa

El 5 de marzo es el Día de la Eficiencia energética

Según el Informe de Eficiencia Energética en las PYMES publicado en 2017, las pequeñas y medianas empresas españolas podrían ahorrar hasta un 24% en energía. ¿Cómo pueden hacerlo?

Aislamiento y temperatura

Una de las principales medidas es el aislamiento de las oficinas, fábricas o instalaciones. Con un correcto aislamiento se ahorra tanto en calefacción en invierno como en aire acondicionado en verano.

Si no hay presupuesto para una reforma integral del edificio, una medida útil es cambiar las ventanas y colocar vidrios dobles con una cámara intermedia lo más ancha posible.

También es importante localizar las posibles fugas de aire. Unas ventanas bien selladas y que la caja de la persiana esté completamente cerrada son cuestiones básicas.

A la hora de elegir el sistema energético para la calefacción o el aire acondicionado, podemos apostar por las energías renovables. Cada empresa ha de encontrar la solución que se ajusta a sus características.  El carbón o gasoil son energías en desuso. La energía fotovoltaica, la biomasa, la geotérmica o la solar térmica son algunas soluciones alternativas.

El mantenimiento de los aparatos es otro elemento fundamental. Por ejemplo, controlar el termostato: las recomendaciones hablan de un máximo de 21º en invierno y un mínimo de 25º en verano. Podemos conseguir estas temperaturas cambiando los hábitos de vestir de nuestros trabajadores. Los trajes de chaqueta en verano quizá no sean la solución más práctica.

La iluminación

Las bombillas de bajo consumo mejoran la eficiencia energética

En lugar de bombillas incandescentes, la tendencia nos lleva al uso de LED y fluorescentes, que reducen el consumo de energía en luz. También se recomienda instalar sensores crepusculares, que apaguen el suministro eléctrico de forma automática cuando un espacio está vacío.

Utilizar la luz natural es un método de ahorro que, además, mejora el estado de ánimo de los trabajadores. Cuando sea posible, podemos colocar tragaluces naturales en lugares estratégicos.

Asimismo, tanto para este punto como para el anterior es importante atender la distribución de los espacios de trabajo. Hemos de pensar si se pueden reubicar ciertos puestos para optimizar los recursos climáticos y de iluminación. Por ejemplo, en lugar de tener a los trabajadores repartidos en una gran superficie, es más práctico que estén situados cerca los unos de los otros.

Otros aspectos a tener en cuenta

Dentro de unos años, en las ciudades solo podrán circular los vehículos con cero emisiones. Por ello, podemos renovar ya los coches de empresa y apostar por vehículos eléctricos. Cuando estas medidas sean obligatorias, las compañías que las hayan tomado ganarán en competitividad.

Los horarios de la empresa también afectan a la eficiencia energética. Si nos acercamos al modelo europeo, trabajaremos con más horas de sol, por lo que se reducirá la factura de luz.

También podemos ahorrar en agua. Los reductores de caudal disminuyen el gasto a la mitad. Otro sistema es el de los perlizadores, que combinan agua y aire y dan la sensación de que tenemos la misma cantidad de caudal. Aunque es un método menos extendido, también existe el uso de las aguas grises. Se trata de sanitarios que reutilizan el agua del lavabo para usarla en la cisterna.

Ayudas y subvenciones

Los gobiernos están muy implicados con la implantación de medidas que favorezcan la eficiencia energética. Por eso, las pymes deben saber que cuentan con diferentes líneas de ayuda.

El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) es una institución que forma parte del Ministerio para la Transición Ecológica. A finales de febrero, este organismo anunció un nuevo programa de incentivos para pequeñas y medianas empresas y la gran empresa industrial.

Su objetivo es mejorar la eficiencia energética de las mismas como parte de la estrategia hacia la transición energética en la que está inmersa nuestro país. Está dotado de 300 millones de euros del Fondo Nacional de Eficiencia Energética. Cuenta además con la cofinanciación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder).

Empresas especializadas

Paneles solares para la eficiencia energética

También existen muchas empresas que trabajan para mejorar la eficiencia energética de otras compañías. En primer lugar, realizan una auditoría energética que analiza los procesos de la compañía y dictamina de manera personalizada las mejoras que se deben aplicar.

Algunas de esas empresas son:

  • Ainia. Se trata de un centro tecnológico de carácter privado sin fines lucrativos. Ofrecen recursos tecnológicos para identificar los problemas y aportar soluciones que ahorren costes energéticos
  • Schneider Electric. Su herramienta es una app basada en la nube para gestionar la energía y sostenibilidad de cada empresa. Recopila los datos que genera la compañía, realiza informes y análisis y ofrece medidas de ahorro.
  • Remica. Es una empresa de servicios energéticos que ayuda a otras empresas a bajar su factura energética. Su web es un site informativo y accesible con múltiples consejos y soluciones.

Según la Agencia Internacional de Energía, la eficiencia energética puede lograr que, en 2050, las necesidades energéticas del mundo se reduzcan en un tercio. Un buen dato para reflexionar en un día como hoy.

Imágenes | Photo by Avantgarde Concept on Unsplash, Photo by Axel Antas-Bergkvist on Unsplash, Photo by Biel Morro on Unsplash, Photo by Chris Leggat on Unsplash

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