La digitalización del pequeño comercio ha sido durante años un reto para este tipo de negocios, que con frecuencia carecen de los medios necesarios para combinar su tradición offline con las nuevas necesidades online. Con el fin de ayudar al pequeño comercio nace el proyecto ‘Transformación Digital para el desarrollo empresarial inclusivo’, de la Fundación IE.
Este proyecto nace con el apoyo de la JPMorgan Chase Foundation, la colaboración del Ayuntamiento de Madrid a través de la Dirección General de Comercio y Hostelería y la participación de Orange con el servicio ‘Tu tienda online de Orange para autónomos’, al que podrán acceder de forma gratuita los beneficiarios adscritos a la especialización de Tiendas Online. Así es como se ayuda a 70 empresas madrileñas a digitalizar sus negocios.
¿En qué consiste ‘Transformación Digital para el desarrollo empresarial inclusivo’?
Si la primera edición del proyecto tenía como objetivo el reto de “diseñar una metodología que promueva la adopción de nuevas tecnologías entre los propietarios de pequeñas empresas”, la edición de 2020 está particularmente centrada en la resiliencia del pequeño comercio ante la COVID-19. Las repercusiones sociales de esta enfermedad han cambiado muchos sectores.
Concepción Galdón, directora del Social Innovation & Sustainability Center @IE University, y directora del proyecto, nos comenta cómo desde la Fundación IE buscan “contribuir a la reconstrucción en la crisis de la COVID-19”, siendo el principal objetivo de este proyecto “apoyar a los pequeños comercios de Madrid en su esfuerzo por gestionar el impacto que esta crisis tiene sobre ellos a corto, medio y largo plazo, priorizando los barrios más vulnerables de la ciudad”.
A través de este programa, “70 pequeños comercios de la ciudad tienen la posibilidad de desarrollar su estrategia en el mundo digital desde julio de 2020 hasta finales de marzo de 2021”, de manera que puedan pasar a formar parte de ese aún pequeño pero creciente porcentaje de pymes digitalizadas.
La pequeña empresa necesita digitalizarse
“Muchas tiendas de barrio están desapareciendo debido a la crisis y al nuevo modelo de sociedad”, confirma Galdón, “algunas de ellas con décadas de historia a sus espaldas”. Esto supone una pérdida en empleo de calidad y de atención al cliente.
A pesar de que “las tiendas de barrio ofrecen productos locales y artesanales de gran valor […] tienen un coste de producción mayor y por tanto un precio más alto”, lo que las penaliza de cara a otro tipo de negocios de bajo coste y calidad. La digitalización es un medio clave para que estos negocios tradicionales puedan adaptarse a las nuevas demandas sociales.
Al respecto, Orange aportó a los participantes la posibilidad de acceder de forma gratuita durante un año a Tu tienda Online a través de fibra, y ocho de ellos estuvieron interesados en el paquete. Con él se puede contratar de forma sencilla un dominio y hosting, crear una tienda online e integrar medios de pago. Esto puede ser decisivo a la hora de aumentar la visibilidad del local, su presencia online y su facturación.
Sin embargo, la digitalización no está en principio al alcance de todos, dado que se necesitan conocimientos e instrumentos específicos para la venta y presencia online. “La transformación digital permite aumentar la facturación del negocio existente”, asegura Galdón, pero eso pasa por “la revisión del modelo de negocio”.
La crisis sanitaria ha acelerado la tendencia de los clientes digitales, y “la falta de acceso real a los servicios de apoyo a la transformación digital es crítica para los pequeños comercios de barrio”. Para tratar esta brecha de conocimientos nació el proyecto de la Fundación IE que busca, en principio, compaginar la tienda física con una tienda online y transmitir todo el know how básico relacionado con la presencia de una marca en el mundo digital.
¿Qué necesitan las pymes para digitalizarse?
Carmen Álvarez, project manager del proyecto ‘Transformación Digital para el desarrollo empresarial inclusivo’ de la Fundación IE, confirma que las pymes necesitan “apoyo a través de subvenciones, ayudas públicas, y colaboraciones” que les permitan “desarrollar la digitalización de sus negocios”. Un soporte sobre el que levantarse, como es el caso del programa en cuestión.
Este programa “equipa a los negocios con el conocimiento y herramientas necesarias para reforzar sus ventas más allá de la tienda física” y, además, lo hace de forma proporcional a las necesidades de las pymes. Este punto es clave, dado que no todos los pequeños negocios presentan la misma estructura ni existe una solución trivial aplicable al conjunto de pymes.
Como puntualiza Poliana Muñoz, también project manager del proyecto, “la atención personalizada es crucial para ayudar a los empresarios a superar cualquier miedo de cara a la digitalización”. En este sentido el papel de la figura del tutor ha sido clave.
Compartir los datos para que otros puedan aplicarlos
Sostiene Muñoz que “el proyecto concluye oficialmente con la presentación de un informe final donde se recogerán todas las lecciones aprendidas” que “se hará llegar a todos los participantes al evento”, además de almacenarse en el Centro de Innovación Social y Sostenibilidad.
Se trata de una forma abierta de aprender con todas las empresas participantes y terceras partes que accedan a la misma información, de manera que exista también transferencia de conocimiento entre compañías. Como remarca Muñoz, “que cualquier persona o ente interesado pueda utilizarlo y servirse de los conocimientos adquiridos”.
Galdón recuerda que “todas las lecciones aprendidas, documentos utilizados y vídeos grabados de la primera edición están subidos a la web del proyecto”, por lo que incluso las empresas no participantes podrán acceder a cierta información que les permita dar los primeros pasos.
Las condiciones para participar en el proyecto
La “evaluación de la Primera Edición concluyó que la participación en el proyecto había tenido un impacto positivo en las ventas de los comerciantes cuando se comparó con el aumento medio de las ventas de las pequeñas empresas del grupo de control”, asegura Galdón. Es decir, el programa funciona y ha demostrado utilidad real.
Para poder obtener datos fiables, el año pasado se dividió el proyecto en dos grupos de participantes: aquellos que recibieron asesoramiento a través de una empresa externa (llamado a nivel técnico ‘grupo de control’), y un grupo de perfiles similares que participaron en el proyecto de la Fundación IE.
En esta Segunda Edición sólo trabajaremos con un grupo de control más numeroso contrastando esta experiencia con la realidad de estos negocios.
Como resume Muñoz, para participar en la Segunda Edición del Proyecto tienes que cumplir estas condiciones:
- Ser dueño de tu propio negocio y tener menos de nueve empleados a tu cargo, incluyéndote a tí mismo.
- Tu negocio debe estar abierto al público desde hace al menos dos años.
- El negocio ha de estar situado en alguno de los barrios de prioridad para el proyecto.
En otras palabras, situarse en una posición de alta necesidad de digitalización pero sin acceso a ella. Para participar en la próxima edición, las candidaturas se abrirán a su debido tiempo en la página web del proyecto. También es posible ponerse en contacto con las autoras en el email ‘socialinnovation@ie.edu’.
Imágenes | Fundación IE
