YouTube es mucho más que ocio y un trampolín a la fama para los millennials. Esta plataforma, frecuentemente asociada al entretenimiento rápido y fácil, puede ser el mejor escaparate posible para los negocios, si se saben aprovechar las innumerables posibilidades audiovisuales que ofrece. Lo primero que hay que saber es que no se trata solo de cargar clips de vídeo, sino de diseñar una estrategia de marca en la que el SEO y la gestión de contenidos serán el pan y la sal para sacar partido de las ventajas de YouTube para empresas.
Antes de crear el canal
Parece una obviedad pero, para ser exitoso en el buscador de vídeos líder en el mundo, no solo hay que conocer el producto que se vende, sino sobre todo a sus potenciales destinatarios.
Javier Manzaneque es una voz autorizada en YouTube. Gestor de cuentas con más de cuatro millones de visitas, desgrana los secretos del videomarketing en su web. En declaraciones a Hablemos de empresas, enfatiza la importancia de la planificación antes de dar el paso de probar en la plataforma: «La cuestión clave para poder tener éxito con un canal de YouTube es hacerte las preguntas básicas sobre la estrategia de captación de potenciales clientes de modo orgánico desde tu canal».
Manzaneque explica que el esquema adecuado no es sentarse a esperar a que lleguen las visitas a los vídeos subidos, sino generar contenido asociado a las «necesidades y problemas» de los potenciales clientes «y ser la opción vista por ellos en un porcentaje alto de las búsquedas que hagan para solucionar esos problemas o necesidades».
Se trata, por tanto, de ‘hacerse un nombre’, es decir, generar para la marca un prestigio vinculado al área en la que opere la compañía, lo que se conoce como inbound marketing o marketing de atracción.
Generando contenido de valor
«Si de cinco búsquedas que intenten nuestros clientes en potencia, nosotros aparecemos en dos o tres, seremos para ellos una autoridad en ese problema», sentencia el experto. El camino para llegar a esa meta, es decir, para ser referentes en YouTube, es darle al target de la empresa lo que busca: en otras palabras, contenido de valor.
La premisa, según el especialista consultado, es clara: «Para que realmente nuestro espectador vea valor en nuestros vídeos, debemos comenzar por conocerle mejor de lo que se conoce él mismo». La empresa, por tanto, debe tener un conocimiento impecable de su sector de actividad y de su mercado antes de colgar el primer clip.
Una vez realizado este trabajo, el siguiente paso para aprovechar las ventajas de YouTube para empresas es asociar las necesidades y demandas del target a un grupo de categorías, para poder generar contenido sobre ello. Para esto, comenta Manzaneque, es importante contar con las búsquedas que realiza nuestro espectador ideal en la propia ‘casilla blanca’ de la plataforma. «Simplemente escribiendo el término asociado a la necesidad del cliente, ya nos surgirán varias opciones que nos pueden servir para futuros títulos de vídeos». SEO en estado puro.
Realización de los vídeos
Puestos los cimientos, es hora de construir la marca audiovisual de la compañía y trasladar a un clip su capacidad de dar soluciones. Aunque se cuente con una buena infraestructura técnica, conviene empezar de forma modesta, con sencillas presentaciones de PowerPoint o Keynote.
Estos primeros vídeos deberían tener una estructura ‘problema-agitación-solución’, es decir, «entrar en el dolor de la persona, agitar ese dolor, presentar tu solución como experto y llevar a los espectadores a un registro de tu contenido gratuito (ebook o minicurso) para captar su email«, desgrana Manzaneque.
Una vez dominado este proceso, se puede expandir el canal en calidad y cantidad invirtiendo en cámaras, iluminación y demás accesorios de videomarketing; o ampliando el personal que participe en la realización y presentación de los vídeos.
Imágenes | @nordwood y @jesuslovesaustin en unsplash
