A principios de febrero, el Gobierno conseguía convalidar la reforma laboral en el Congreso. Y lo hacía con un ajustadísimo resultado, 175 votos a favor y 174 en contra, gracias a un error de un diputado del Partido Popular que votó de forma telemática.
El presidente Pedro Sánchez lograba sacar adelante el proyecto de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, sin el respaldo de todo el bloque de izquierda que apoyó su investidura. En este sentido, finalmente PNV, EH Bildu y ERC votaron en contra.
Objetivos de la reforma laboral
La reforma, pactada por el Ejecutivo con patronal y sindicatos tras casi un año de negociaciones, persigue la creación de empleo estable y de calidad. Su objetivo es reducir la excesiva temporalidad en la contratación de la que adolece el mercado de trabajo español.
Con el nuevo texto, el Gobierno da cumplimiento a los requerimientos de Bruselas, que reclama a España medidas para combatir la temporalidad y el paro juvenil, y que había condicionado la aprobación de esta norma a la recepción de una nueva partida de los fondos europeos.
Pero ¿cuáles son las principales novedades de la primera reforma consensuada entre el Gobierno y los agentes sociales en 15 años? ¿Qué cambios introduce respecto a la legislación aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2012?
Cambios de la reforma laboral de 2022 respecto a la de 2012
Límites a la contratación temporal
La nueva legislación establece que el contrato indefinido será el ordinario y desaparece el contrato de obra y servicio, modalidad de contratación temporal responsable, según el Gobierno, de los mayores fraudes.
Así, solo se podrán concertar contratos temporales por dos causas: para sustituir a un trabajador o por circunstancias de la producción.
Respecto a este último, se contempla un contrato temporal por circunstancias de la producción para situaciones ocasionales imprevisibles, que no podrá durar más de seis meses, ampliable a un año por convenio. También se establece otro para situaciones ocasionales y previsibles, cuya duración máxima será de 90 días, nunca de manera continuada.
Además, un trabajador temporal será fijo si acumula 18 meses de trabajo bajo contratos temporales en 24 meses. También pasarán a ser indefinidos los temporales fraudulentos.
Por otra parte, el contrato temporal de obra para la construcción se transforma en indefinido. Finalizada la obra, la empresa deberá hacer al trabajador una propuesta de recolocación.
Impulso del contrato fijo discontinuo
La normativa refuerza la utilización de los contratos fijos discontinuos para mejorar la estabilidad de los trabajadores de sectores sometidos a una gran estacionalidad, como el del turismo. Las empresas de trabajo temporal y subcontratas podrán celebrar este tipo de contratos y, a efectos de antigüedad, se tendrá en cuenta toda la duración de la relación laboral y no solo el tiempo de servicios efectivamente prestados.
Mayores sanciones por fraudes de ley
Las multas por con