En internet, lo que por la mañana parecía una noticia crucial, puede caer en el olvido esa misma tarde. El ritmo frenético de novedades nunca se detiene, por lo que el contenido evergreen es un valor seguro para las marcas.
Según la traducción literal, evergreen significa ‘siempre verde’. Y en relación al mundo del marketing se refiere a un material que nunca pasa de moda, cuya validez permanece incluso meses después de haberse publicado. hde_related]
Qué es el contenido evergreen: definición
El material evergreen es un contenido de calidad que aspira a ser relevante y que está bien optimizado para SEO. No está anclado a un momento actual ni concreto y su objetivo es seguir generando tráfico orgánico, aunque haya sido publicado hace tiempo. Trata temáticas recurrentes, que nunca pierden el interés para el público y que siempre aportan valor e información útil.
No deja de rentabilizarse en el tiempo, ofreciendo resultados a medio y largo plazo. Puesto que el tema siempre despierta atención, es una forma de atraer clientes de manera periódica y sin tener que construir una y otra vez nuevos temas. Y genera engagement.
Los pros y los contras
Apostar por el contenido perenne no significa rechazar un material más anclado a la actualidad. Este también reportará tráfico y atraerá lectores con mayor inmediatez. Simplemente, se trata de equilibrar ambas herramientas para usarlas de forma complementaria, dependiendo del momento.
Además de lo ya explicado respecto a su relevancia y a que es una fuente de tráfico inagotable, los contenidos evergreen presentan otras ventajas:
- Mejoran la imagen de marca. Un material cuya validez nunca caduca tiene una pátina de rigor y conocimiento que se transmite a la marca que lo publica. Genera confianza y posiciona a la firma como experta en esa materia.
- Son susceptibles de estar bien posicionados en búsquedas. Uno de los criterios que usa Google cuando muestra resultados es la calidad de los enlaces que recibe. Calidad y autoridad son dos principios básicos que definen un contenido evergreen. Asimismo, suelen desarrollarse con palabras clave long tail, que suponen búsquedas más específicas y sencillas de mantener en las primeras posiciones.
- Sirven para segmentar leads. Los temas anclados a la actualidad interesan a cualquier individuo que quiera mantenerse al día. Sin embargo, el material perenne atrae a un público con una necesidad más concreta. Es más sencillo recopilar los datos de estos usuarios y segmentarlos por intereses.
- Son compartibles. Responden a dudas comunes. Si un usuario encuentra útil esa información, es previsible que la comparta con su comunidad. Por parte del emisor, también es fácil volver a reutilizarla y lincarla cuando se habla de temas relacionados.
Igualmente, hay algunos inconvenientes que considerar:
- Exigen un esfuerzo de tiempo y dedicación. La información debe ser rigurosa y de calidad, analizando cada aspecto en profundidad, lo que implica un trabajo de documentación exhaustivo.
- Aunque decimos que es un contenido atemporal, algunas indicaciones pueden quedar obsoletas, por ejemplo, al hablar de determinados productos que ya no estén a la venta o de procesos que se han modificado.
Ejemplos de contenido evergreen
Lo más sencillo es preguntarse: ¿cuáles son los contenidos que nunca pasarán de moda?
- Preguntas y respuestas. Son los clásicos artículos de resolución de problemas. Desde los que solventan dudas sobre el funcionamiento de un producto a los que explican cómo realizar la devolución de un artículo.
- Tutoriales. Se trata de seleccionar temas relacionados con la marca y redactar guías que expliquen el paso a paso. Es uno de los contenidos más demandados, sobre todo para el uso herramientas.
- Listas. Otro de los temas que mejor funcionan en SEO. Las listas con ‘los mejores…’ o ‘los más prácticos…’ ofrecen materias asequibles y de fácil consumo. Su inconveniente es que quizá queden obsoletos con mayor rapidez.
- Reseñas de productos. Las empresas con un ecommerce pueden dedicar piezas enteras a explicar las características de un artículo, especialmente si desean dar un empujón a su visibilidad y ventas.
- Glosarios. Si la marca maneja terminología muy específica, también será práctico ofrecer un contenido que defina con claridad cada concepto. Ayudará al usuario a enfocarse en qué necesita.
En cuanto al formato, el texto, por sí solo, es posible que se quede corto. Hacerlo más atractivo es muy sencillo con elementos visuales como vídeos o infografías.
Consejos para crear un buen contenido evergreen
Hay una serie de consejos que poner en práctica:
- Buscar temas relevantes. Para encontrar temáticas que se traduzcan en un gran volumen de visitas a lo largo del tiempo, es útil investigar qué tipo de búsquedas hacen los usuarios y localizar las palabras clave que siguen generando tráfico aunque pase el tiempo.
- SEO optimizado. En una línea similar, los contenidos deben estar optimizados respecto a las palabras clave, las etiquetas, los títulos o las metadescripciones. Aunque las reglas básicas del SEO se mantienen, algunas cuestiones pueden modificarse. Se debe estar pendiente de este tipo de actualizaciones.
- Focalizar en el cliente potencial. El tope del embudo es la parte inicial del viaje del consumidor, en la que el usuario comienza a conocer a la marca y sus productos. Redactar textos básicos y amplios que actúen como puerta de entrada favorecerá ese acercamiento.
- Fácil de entender. Los textos bien estructurados y claros atraen más a los lectores y fidelizan a los usuarios, que siempre volverán a ese site a buscar más información. Es una regla básica incluso para quien quiera posicionarse como experto en la materia.
- Enlaces internos. Señalar que hay más materiales relacionados en el portal que interesarán al usuario es una forma de demostrar autoridad en la materia.
- URL cortas y simples. No solo facilitarán el posicionamiento en buscadores, sino que serán más sencillos de recordar y compartir.
- Revisar el contenido. Con el paso del tiempo, siempre habrá información que actualizar, datos que revisar o enlaces de vídeo rotos.
Por último, la clave no es solo el contenido, sino su promoción y difusión. Es útil volver a relanzarlo si, por ejemplo, se publica en redes sociales, donde es fácil que un tema pase desapercibido, sepultado entre nuevas publicaciones; o reutilizarlo, convirtiéndolo en otro formato que atraiga a una audiencia diferente.
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