El Gobierno y los sindicatos, con el rechazo de la patronal, han pactado una subida temporal de las cotizaciones para llenar la hucha de las pensiones ante el incremento del gasto que supondrán las jubilaciones de la denominada generación del baby boom (7,7 millones de españoles nacidos entre 1957 y 1977).
El acuerdo alcanzado entre Ejecutivo y sindicatos supone subir 0,6 puntos durante diez años (entre 2023 y 2032) las cuotas sociales de todos los trabajadores. Esto significa que esta sobrecotización no solo afectará a los 16,35 millones de asalariados y a sus empleadores, sino también a los más de 3,3 millones de trabajadores autónomos.
En el caso de los trabajadores por cuenta ajena, de los 0,6 puntos, 0,1 se descontarán de la nómina del trabajador, mientras que el 0,5 restante correrá a cargo de la empresa. Según explicó el propio ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, esto supondrá un incremento mensual de los pagos sociales que no llegará a los 12 € mensuales en una base media de cotización de alrededor de 2000 € al mes. De esa cantidad, algo menos de 10 € los pagará el empresario y poco menos de 2 €, el trabajador.
En el caso de los autónomos, sin embargo, estos tendrán que abonar en su totalidad esas seis décimas de sobrecotización.
Fuerte subida de las cuotas en los próximos años
El nuevo mecanismo de equidad intergeneracional, que es como se denomina este aumento del tipo de cotización, se aplicará a partir de 2023, y se suma a la subida tanto de las bases como de los tipos de cotización a los que los trabajadores por cuenta propia tendrán que hacer frente a partir de enero de 2022. Todo ello en un momento en el que el colectivo aún no se ha recuperado del duro golpe que ha supuesto para sus negocios la COVID-19.
Así, dado que la base mínima crecerá un 1,7 % a partir de enero de 2022, según lo aprobado en los Presupuestos Generales del Estado para el año que viene, y el tipo de cotización será del 30,6 % (frente al 30,3 % actual), los autónomos deberán pagar desde principios del próximo ejercicio una cuota mensual de 294 €. Son 8 € más que los 286 € que los autónomos que cotizan por la base mínima (la mayor parte del colectivo) están pagando en la actualidad.
Sumando los 0,6 puntos que aumentará el tipo de cotización a partir de 2023 para pagar las pensiones de los baby boomers, el tipo de este colectivo subirá al 31,2 %. De este modo, si se aplica este porcentaje a la base mínima, y sin contar si en los Presupuestos Generales se recogerá otro aumento para 2023, la nueva cuota mínima que los autónomos deberán pagar desde 2023 crecerá hasta rozar los 300 €. Esto supondrá al menos 6 € mensuales más que los 294 € al mes que pasarán a pagar estos trabajadores desde enero de 2022, es decir, 72 € más al año.
Un incremento que será mayor para los autónomos societarios. Su base mínima de cotización será a partir de enero de 2022 de 1234,86 €, y su cuota (con el tipo del 30,6 % previsto) ascenderá a 377,87 € mensuales. Esto supone que, sumando los nuevos 0,6 puntos del mecanismo de equidad al tipo de cotización (hasta el 31,2 %), la cuota se elevaría a 385,27 €, unos 7 € más al mes.
Estas subidas se dan cuando, justo en 2023, está previsto que eche a andar el nuevo sistema de cotización de los autónomos en función de sus ingresos reales, cuyo diseño se espera cerrar en el primer trimestre de 2022.
«La vaca no da más leche»
En cualquier caso, este nuevo encarecimiento no ha sido bien acogido por las organizaciones que representan al colectivo, pues denuncian que se suma a las trabas que ya de por sí sufre. «Ni es un mecanismo, ni es de equidad, ni mucho menos intergeneracional, puesto que, además, va a castigar a los más jóvenes», advirtió el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor.
Para el también vicepresidente de la CEOE, la medida puede poner en peligro muchos puestos de trabajo en una coyuntura económica muy delicada. «El mejor mecanismo para hacer sostenible las pensiones es crear más empleo. Subir cotizaciones en un país con una tasa de desempleo del 15 % y más de tres millones y medio de parados, lo único que va a hacer es endurecer las nuevas contrataciones y, por tanto, tendrá el efecto contrario».
Amor lamentó que se haya recurrido «a lo más fácil para tapar el agujero«. «Es como si un hostelero que tiene déficit de ingresos tiene la feliz idea de subir los precios de su carta», manifestó. «Nos han subido las cuotas de autónomos, las cotizaciones, los costes laborales, la luz, los carburantes… Están asfixiando al tejido empresarial«, criticó el representante de los autónomos, que avisó al Ejecutivo central de que «la vaca no da más leche«.
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